Suicidios en la comunidad transgénero

El suicidio en la comunidad transgénero ya no es, ni debe ser, un tema tabú. Es un llamado a la solidaridad, al compromiso y a la acción.

Los suicidios en la comunidad transgénero son un tema delicado, pero no por eso debe ser escondido. De hecho, hoy en día se conoce más por la trascendencia que le han dado las redes sociales que por las difusiones de los organismos de salud, y eso es uno de los derechos que tenemos que defender con uñas y dientes.

La tolerancia al individuo trans varía de país a país e incluso de ciudad a ciudad como analizamos en el blog anterior: 5 ciudades más tolerantes con las personas transgénero (y una sorpresa)

Hablemos de los suicidios, porque hablando se combaten los fantasmas

Los investigadores y psicólogos concuerdan que, para evitar las causas asociadas a los suicidios de hombres y mujeres transgénero, es imprescindible que parte del presupuesto de salud de cada país se destine a una educación social en todas las etapas escolares, políticas de integración e inserción social y laboral más inclusivas y equitativas, y reforzar el acompañamiento emocional y terapéutico.

Aseguran que la primera tarea de los centros sanitarios y, especialmente de los médicos, debe ser la de analizar la orientación sexual de los pacientes y asignar la asistencia psicológica adecuada, con el cuidado de realizar un seguimiento de los niños, adolescentes y adultos que presenten alguna señal de conducta suicida entre ellos: depresión, ira, baja autoestima, desconcierto, tristeza y desánimo.

¿Por qué sucede?

Existen tantos motivos como personas transgénero hay en el mundo. Todo es parte de una gigantesca avalancha de sentimientos. Podemos enumerar algunas causas, aunque no en orden de prevalencia, ya que cada ser es un mundo.

Estos motivos, por nombrar algunos, son:

  • La falta de apoyo y acompañamiento familiar.
  • La discriminación: debido a la falta de inclusión en la legislación y la deficiencia del sistema educativo.
  • Los abusos psicológicos y físicos.
  • Falta de posibilidades o de igualdad de oportunidades.

Los números a veces mienten

La tasa de suicidios entre la comunidad transgénero es muy difícil de establecer, ya que en el momento del fallecimiento no se registra la orientación sexual ni la identidad de género del fallecido. Por lo que los datos sobre esta problemática son aún más preocupantes.

Lo cierto es que, a partir del año 2015, se reconoce al suicidio como la segunda causa de  mortalidad entre jóvenes de entre 15 y 35 años y que, además, ocupa el tercer lugar en los niños y adolescentes que se encuentran entre los 10 y los 14 años, determinando que el sector más vulnerable y con mayor riesgo es la comunidad transgénero.

No necesitamos de encuestas, tasas, porcentajes o tendencias para comenzar a actuar.

Las estadísticas, basadas en estudios aleatorios, señalan que, al menos, 4 de cada 10 personas transgénero ha intentado o pensado en suicidarse. Aunque estos resultados han sido obtenidos de encuestas y conociendo que, lastimosamente, hay sectores poblacionales con mayores índices que los expuestos, y aún planteando un porcentaje menor en otros, es claro que los suicidios son un tema delicado, aunque aún así evitable.

7 señales: El saber te da el poder…

Cuando se trata de conductas potencialmente suicidas, es posible que puedas identificarlas de inmediato, o que estén tan ocultas que el desenlace resulta casi increíble.

Aunque es cierto que la falta de apoyo familiar y del entorno más cercano es uno de los detonantes principales, los factores que pueden dar cuenta de alguna dificultad y que llevan a una persona a hacerse daño, fuera de estos, pueden ser levemente perceptibles.

Enciende tus sentidos y si notas algunas de estas actitudes, en tí mismo o en alguien más, pide ayuda:

  1. Aislamiento.
  2. Muy Baja autoestima.
  3. Abuso de sustancias tóxicas.
  4. Resignación.
  5. Falta de interés por su salud o higiene personal.
  6. Depresión.
  7. Ansiedad o miedo a socializar.

La información, la educación y el interés por esta problemática puede salvar más de una vida y, de a uno podemos ir disminuyendo el abrumador número que denota el crecimiento de suicidios a nivel mundial dentro de la comunidad transgénero.

Sigue en redes sociales a gente como Angela Ponce que representan una nueva época más tolerante y abierta a todos los individuos.

Mirar hacia nuestro alrededor y saber que estamos juntos en esto, que somos parte de todo, es nuestra mayor fortaleza como comunidad.

¿Te nos unes?

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